Excesos hídricos. El desafío de hacer jugar el agua a favor y defender la cosecha.

La campaña agrícola entra en etapa de definiciones con miles de millones de dólares -inciertos aún- en juego. Qué tener en cuenta en los cultivos y en los rodeos. La emergencia y las obras…

No para de llover, muchos campos siguen inundados, y los pronósticos indican que los excesos hídricos continuarán hasta la cosecha, como contracara “increíble” de la anterior campaña agrícola, castigada por la sequía. El agua en general es bienvenida en el campo, pero esta vez es tanta que vuelve a poner en riesgo la producción agrícola 2018-19 estimada hasta hace poco en US$ 30.000 millones.

En estas condiciones, en sojas ya establecidas podrían proliferar enfermedades de fin de ciclo, es decir foliares fúngicas. También habrá putrefacciones de tallo en su base, sobre todo en los lotes donde hubo otra soja previa. En siembras tardías, por ejemplo, luego de un trigo, podrá haber problemas de emergencia debido a anegamientos que promueven la acción de patógenos en el suelo. En estos casos habrá que prestar atención a la semilla y a su protección.

En el caso del maíz con un buen año precisamente en lo que hace a lluvias tanto en cantidad como en fecha, también se podrán generar enfermedades foliares.

 

Fuente: Clarín Rural.